Entre tonos de gris, de Ruta Sepetys, cuenta una historia que para mi gusto es muy interesante y tiene un punto didáctico, ya que nos habla sobre la vida que llevaban los habitantes de Lituania y los países cercanos en los tiempos en los que Stalin comienza la invasión en los países bálticos. La protagonista es Lina, una chica lituana de quince años que fue llevada a los campos siberianos de la Unión Soviética, junto a su madre, su hermano y su padre, aunque a este lo separaron de ellos. La historia cuenta algo que te mantiene leyendo hasta el final, y que no puedes parar de leerlo. Los personajes tienen mucho valor, sobre todo Lina, una joven muy valiente y decidida.
En mi opinión, este libro tiene una parte dura, ya que Lina no deja de ser una adolescente secuestrada a la que obligan a trabajar y maltratan, y relata todo lo que le sucede por muy duro que parezca.
Con este libro puedes reír, aunque sea un libro algo duro; puedes llorar, por esas escenas crueles o te puedes emocionar, porque también hay una historia de amor. Es un libro muy realista al que no se le pueden poner pegas, aunque si tuviera que poner alguna sería que no se narra la salida de Lina de aquellos lugares ni su reencuentro con Amdrius. Es una obra, para mí, completamente recomendable.
Reseña hecha por María García Ponte, 3º ESO A.
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